El Centro de Información Israelí para los Derechos Humanos en los Territorios Ocupados, B’Tselem, presentó el informe “Nuestro Genocidio”, en el que documenta más de 58 mil asesinatos en Gaza desde octubre de 2023 y acusa al Estado israelí de ejecutar una campaña de exterminio con intención genocida.
Por Redacción / @Somoselmedio
Ciudad de México, 29 de julio de 2025.- En una acusación sin precedentes emitida desde el propio territorio israelí, el Centro de Información Israelí para los Derechos Humanos en los Territorios Ocupados, B’Tselem, publicó el informe “Nuestro Genocidio”, donde sostiene que el Estado de Israel ha llevado a cabo una política sistemática de exterminio contra la población palestina en la Franja de Gaza. El documento argumenta que las acciones israelíes cumplen con todos los elementos jurídicos que configuran el delito de genocidio, de acuerdo con el derecho internacional y con la Convención de la ONU de 1948.
El informe presenta cifras estremecedoras: más de 58 mil personas han sido asesinadas en Gaza desde octubre de 2023. De ellas, el 29% son menores de edad, el 15% mujeres y al menos el 7% personas mayores. A ello se suma el colapso total de la infraestructura civil, con hospitales, escuelas, mezquitas, viviendas, sistemas de agua, energía y telecomunicaciones reducidos a escombros. Según datos incluidos en el informe, la expectativa de vida cayó más del 50% entre los hombres y cerca del 40% entre las mujeres, lo que confirma el carácter devastador y prolongado de la ofensiva israelí.
B’Tselem argumenta que los crímenes cometidos no son accidentales ni producto del caos de la guerra, sino que responden a una política planificada de destrucción. El informe incluye declaraciones de altos funcionarios del gobierno y el ejército israelí en las que se enuncia con claridad la intención de atacar no sólo a militantes armados, sino a la sociedad palestina en su conjunto. Esta intención, conocida jurídicamente como “dolus specialis”, es un elemento clave para tipificar el crimen de genocidio.
El documento también denuncia que la represión y la violencia se han extendido más allá de Gaza. En Cisjordania y en ciudades dentro del propio Estado de Israel donde residen ciudadanos palestinos, se han intensificado las políticas de despojo, el racismo institucional, los desalojos forzados y las restricciones a la libertad de expresión. El informe señala que existe una voluntad sistemática de eliminar la identidad política, cultural y territorial del pueblo palestino en su totalidad.
Al concluir, B’Tselem advierte que si la comunidad internacional no actúa con firmeza para detener este genocidio, se corre el riesgo de sentar un precedente nefasto: legitimar que otros Estados cometan crímenes de esta magnitud bajo la bandera de la seguridad nacional. Por ello, el informe hace un llamado urgente a la acción, no sólo a los organismos internacionales, sino también a la propia sociedad israelí, para poner fin al exterminio.
El título del informe, “Nuestro Genocidio”, es una interpelación directa a la conciencia colectiva israelí. Retoma el término acuñado por el jurista Raphael Lemkin tras el Holocausto, y sostiene que hoy, desde el Estado que surgió tras aquel horror, se está perpetrando otro genocidio contra un pueblo que lleva décadas resistiendo el despojo, la ocupación y la violencia sistemática.