La nueva pieza “Corazón de Quinceañera”, dirigida por Fabián Cháirez y musicalizada por el pianista británico Mark Springer, inaugura la campaña Sketches of Mexico, una declaración artística y política que apuesta por el arte queer, la identidad disidente y la ruptura de moldes desde una plataforma digital.
Por Mauricio Tizapán / @TizapanMauricio Fotografías @Afra_Eyra / Esmeralda Reyes
Ciudad de México, 16 de julio de 2025 — El pintor mexicano Fabián Cháirez presentó este martes Corazón de Quinceañera, una pieza audiovisual que fusiona pintura, música y performance para colocar en el centro de la conversación a las identidades disidentes, el arte como resistencia y la libertad de ser sin etiquetas. La obra forma parte de la campaña Sketches of Mexico, una colaboración entre Cháirez y el pianista británico Mark Springer, que tuvo su estreno en el Foro Lenín de la Ciudad de México junto a La Bruja de Texcoco y la Orquesta Sinfónica YO.
Dirigido por el propio Cháirez y musicalizado por Springer, el videoclip oficial de Sketches of Mexico se inspira en una de las pinturas más recientes del artista chiapaneco: Corazón de Quinceañera. A través de una narrativa visual poderosa y una sonoridad que conjuga el jazz libre con la disrupción del post-punk, la obra desafía normas sociales e impone una mirada que celebra la diferencia como una fuerza creativa y política.
“Sketches of Mexico es una postura. Es la manera en la que, desde el día uno, declaramos que estamos del lado del arte que incomoda. Arte que piensa”, expresó Cháirez durante la presentación.
La propuesta no solo representa una colaboración entre dos artistas de trayectoria internacional, sino que marca el nacimiento de una campaña artística con carácter político. En palabras del propio Cháirez:
“Esta colaboración es una gran oportunidad para acercar mi pintura a más personas, motivando al público y a la comunidad artística a seguir cuestionando las normas y la censura con nuestras ideas y nuestro arte”.
Arte desde la disidencia
Fabián Cháirez ha sido un referente del arte queer en México, desafiando las narrativas dominantes sobre género, raza y poder. Su obra más icónica, que retrata a Emiliano Zapata con tacones y desnudo sobre un caballo, generó en su momento una ola de polémica, censura y amenazas, pero también abrió un necesario debate nacional sobre la representación y la libertad de expresión.
Por su parte, Mark Springer es reconocido por su enfoque musical radical y su participación en la banda Rip Rig + Panic, que en los años 80 catapultó a la fama a la cantante Neneh Cherry. Su trayectoria incluye composiciones para cine, danza y colaboraciones con figuras clave del jazz y la música experimental. La unión de ambos artistas da como resultado una obra que transgrede formatos, géneros y expectativas.
Una plataforma para nuevas narrativas
El videoclip de Sketches of Mexico puede verse desde el 16 de julio a través de la app oficial de YO Mobile, donde también estarán disponibles entrevistas exclusivas con Fabián Cháirez y materiales sobre su proceso creativo. La campaña Solo YO, impulsada por la misma plataforma, ofrece acceso a experiencias culturales como ciclos de cine, clubes de lectura, visitas guiadas, conciertos, desfiles y más, con énfasis en creadores que están redefiniendo la cultura contemporánea desde los márgenes.
“Esto no es para todos. Es para quienes no quieren encajar. Es para quienes quieren ser Solo YO”, afirma la campaña, dejando claro su enfoque en la individualidad, la autoexpresión y la ruptura con lo establecido.
Fabián Cháirez: arte para resistir
Nacido en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, en 1987, Fabián Cháirez ha desarrollado una obra visual que da protagonismo a personas racializadas y a disidencias sexuales y de género. Egresado de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, su trabajo ha sido expuesto en México, Estados Unidos y Europa, consolidándose como una voz central en el arte contemporáneo que confronta el machismo, el racismo y el clasismo aún arraigados en la sociedad mexicana.
Con Corazón de Quinceañera, Cháirez reafirma que el arte no es decoración, sino una trinchera desde donde se cuestiona, se denuncia y se imagina otro mundo posible.