La comunidad p’urhépecha de Cherán K’eri fue atacada por sujetos armados este 2 de julio; integrantes de la Ronda Comunitaria resistieron la agresión. Denuncian escalada de violencia en Michoacán y responsabilizan al Estado mexicano por omisión y complicidad.
Por Mario Marlo / @Mariomarlo
Cherán, Michoacán. 2 de julio de 2025.- En las primeras horas de este martes, la comunidad indígena de Cherán K’eri fue víctima de un ataque armado perpetrado por sujetos desconocidos que intentaron irrumpir en el territorio por los parajes de Rancho del Pino y Cerrito del Aire. La Ronda Comunitaria, órgano de seguridad autónomo de Cherán, respondió al ataque activando las barricadas para proteger a la población.
El saldo de esta agresión fue de un miembro de la Ronda Comunitaria asesinado y otro herido, lo que ha generado profunda indignación entre los habitantes de esta comunidad p’urhépecha, que desde hace más de una década mantiene un sistema de autogobierno basado en la organización comunitaria, la defensa territorial y la justicia propia.

A través de un comunicado urgente, autoridades tradicionales de Cherán denunciaron que este atentado no es un hecho aislado, sino parte de una escalada de violencia que se ha intensificado en varias regiones del estado de Michoacán. En particular, señalaron que comunidades de la Meseta P’urhépecha como Nahuatzen, Arantepacua, Capácuaro y Santa Fe de la Laguna también han enfrentado amenazas, incursiones armadas y despojo de sus territorios por parte de grupos criminales que actúan con total impunidad.
“Hoy este ataque busca ser un golpe directo al corazón de nuestra autonomía y de todos los pueblos que luchamos por defender la vida”, denunció la comunidad, advirtiendo que los intereses criminales, políticos y extractivos convergen para desarticular los procesos de defensa comunitaria.
Desde 2011, Cherán se ha convertido en un símbolo de resistencia en México, luego de expulsar a partidos políticos, talamontes y al crimen organizado de su territorio, instaurando un modelo de autogobierno reconocido legalmente por el Estado mexicano. Esta experiencia, basada en asambleas, fogatas y rondas comunitarias, ha sido un ejemplo de soberanía indígena y organización colectiva en defensa del bosque, el agua y la vida.
El reciente ataque es interpretado como una represalia contra esta forma de autonomía. La comunidad también cuestionó el discurso oficial del gobierno federal, que presume un “Plan de Justicia para los pueblos indígenas” sin consultar a quienes, como Cherán, enfrentan diariamente la violencia y el abandono institucional.
“¿Dónde están los mecanismos de protección para los pueblos indígenas?”, interroga el comunicado. “Mientras se anuncian reformas constitucionales en materia de justicia y seguridad, los pueblos seguimos desprotegidos, expuestos a la muerte, al despojo y a la impunidad”.
La comunidad hizo un llamado urgente a medios de comunicación, organizaciones sociales y de derechos humanos, así como a la sociedad civil, a mantenerse alertas, difundir lo que está ocurriendo y solidarizarse activamente con Cherán.

Cherán K’eri, comunidad ubicada en el corazón de la Meseta P’urhépecha, es reconocida por haber iniciado en 2011 un proceso histórico de resistencia y autogobierno. Ante la devastación de sus bosques por talamontes vinculados al crimen organizado —con la complicidad de autoridades—, la comunidad se levantó y expulsó a estos grupos, instaurando un sistema de gobierno autónomo regido por sus usos y costumbres.
Desde entonces, han mantenido su territorio libre de partidos políticos y han construido un modelo de seguridad comunitaria basado en la Ronda, la vigilancia vecinal y la asamblea general. A pesar de su reconocimiento constitucional, la comunidad ha enfrentado diversos intentos de desestabilización.

El pueblo purépecha que corrió a los partidos políticos y el crimen organizado