Por Max González Reyes
El pasado viernes 5 de noviembre, en un hecho inédito, la de Diputados Cámara, citó a comparecer ante el pleno al presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova. La comparecencia era para explicar por qué el Instituto está solicitando más recursos para llevar a cabo la revocación de mandato toda vez que está solicitando 5,743 millones de pesos para ese ejercicio. Sin embargo, el bloque mayoritario en la Cámara de Diputados, Morena y sus aliados en coordinación con el Ejecutivo, buscan no asignarle esos recursos pues a su parecer con el presupuesto que maneja el INE tiene para llevar a cabo la consulta para la revocación.
Esa sesión estuvo plagada de descalificativos y agresiones de legisladores de Morena y aliados (PT, PVEM, PES) en contra del presidente del organismo autónomo. De entre todas las descalificaciones vertidas en esa sesión destacaron dos: la del diputado Gerardo Fernández Noroña del PT y del diputado Oscar Cantón Zetina de Morena.
Para los legisladores de Morena, los consejeros y presidente del INE tienen un alto salario y gozan de muchos privilegios, por lo que deberían reducirse el sueldo, para estar en concordancia con la austeridad que pregona la Cuarta Transformación. Asimismo, según ellos, el INE cuenta con un par de fideicomisos de los que podría echar mano para financiar el ejercicio de revocación.
Cabe recordar que desde el inicio de la actual administración, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha descalificado a los organismos autónomos, particularmente al INE. Para él estas instancias deberían desaparecer pues sólo sirven para extraer recursos del Estado. De ahí su propuesta enviada a la Cámara de Diputados para que en el PEF no se le asignen más recursos al INE. Sin embargo, este Instituto será quien se encargue de llevar a cabo la organización de la revocación de mandato, que incluye promoción y capacitación del personal que estará en las casillas el día de la votación. Para el INE llevar a cabo este ejercicio es equivalente a realizar una elección; y si bien el próximo año no es electoral, sí implica una inversión parecida a la realización de comicios.
Por otro lado, los legisladores de Morena desvían la atención de lo realmente importante en todo este debate. Para ellos el presidente del INE es el que pide más recursos para la revocación, siendo que él es el representante de un órgano colegiado, cuyas decisiones se toman de la misma manera.
En la comparecencia ante el Pleno de la Cámara de Diputados los dos legisladores mencionados (Noroña y Zetina) centraron sus descalificaciones en la persona de Lorenzo Córdova, no en la institución; sus posturas no se centraron en argumentos de por qué solicitar más recursos, sino en ataques al Consejero presidente, a tal grado que no tuvieron la cortesía de saludarlo al momento de ocupar la tribuna, pese a que Córdova les ofreció el saludo.
Por otro lado, la madrugada del pasado domingo 14 de noviembre, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el ejercicio fiscal de 2022. El dictamen se aprobó después de cuatro días de un debate que pareció un monólogo de los partidos de oposición, toda vez que de las 1994 reservas que se presentaron no se aprobó una sola. Todas las reservas que se presentaron en tribuna fueron rechazadas por el bloque mayoritario lidereado por legisladores de Morena, por lo que el proyecto fue aprobado tal como lo presentó el Ejecutivo Federal.
La sesión de la Cámara de Diputados en la que se aprobó el dictamen, inició el miércoles 10 y terminó la madrugada del domingo 14 de noviembre, dividida en sesiones de entre 12 y 15 horas. El debate se centró, entre otros temas, en los recursos destinados al ejercicio que se hará el próximo año respecto a la revocación de mandato.
Es obvio que los legisladores de Morena tienen un prejuicio al INE, pues a su parecer éste no actuó bien desde 2006 cuando le robaron la presidencia al actual presidente y resultó ganador el panista Felipe Calderón. Sin embargo, cabe recordar que en aquel tiempo era no existía el actual INE sino el Instituto Federal Electoral (IFE), aunado a que ninguno de los actuales consejeros ocupaba su cargo, además de que el partido Morena como tal aun no existía.
Por otro lado, si el INE ocupara los recursos que maneja en los fideicomisos para la organización de la revocación de mandato estaría incurriendo en una falta puesto que esos recursos ya están destinados a ciertos fines. Eso sí sería una grave falla, la cual implicaría sanciones de tipo penal.
Los legisladores de Morena no hacen sino demagogia y escándalo que los posicione en los medios. Cabe recordar que al final de la sesión del 13 de noviembre, cuando se dictó un receso para continuar con las reservas del PEF, los diputados de Morena tomaron la tribuna para felicitar al presidente y cantarle las “mañanitas” por su cumpleaños. Puras formas, nada de fondo.
Ante todo esto, nos encontramos en un conflicto que seguramente llegará hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ya que los recursos aprobados por los diputados para el INE no son suficientes para llevar a cabo la consulta, y, a su vez, el Ejecutivo busca que se ratifique su mandato el próximo año. Esperemos a ver qué resulta de este desencuentro. La moneda está en el aire.