En una reunión con autoridades estatales, el Frente de Pueblos de la Ribera de Lago de Chapala demandó frenar obras hidráulicas millonarias, denunciaron la falta de transparencia en el proyecto del nuevo acueducto, y propusieron un Plan Integral de Restauración del Lago.

Por Mario Marlo / @Mariomarlo

Fotografías: Shiebi Aguilar / @ShiebiAl 

Guadalajara, Jalisco, 20 de junio 2025.– El Frente de Pueblos de la Ribera de Lago de Chapala, compuesto por comunidades, pueblos originarios, pescadores, lancheros, académicos y defensores del agua de siete municipios ribereños, sostuvo una reunión con autoridades del Gobierno de Jalisco para exigir la cancelación de los megaproyectos hidráulicos que amenazan con agravar la crisis ecológica y social del lago más grande de México.

A pesar de que el gobierno insiste en que el Acueducto Sustituto Chapala-Guadalajara no extraerá más agua de la ya concesionada, el Frente denunció la opacidad del proceso, la falta de estudios públicos y la violación sistemática de su derecho a la información, participación y consulta.  “El Lago de Chapala no es una reserva inagotable de agua, es un ser vivo al borde del colapso.

Durante el encuentro, el Secretario de Gestión Integral del Agua, Ernesto Marroquín Álvarez, y el titular de la Comisión Estatal del Agua, Mario López Pérez, reiteraron que el nuevo acueducto solo sustituirá la actual red de distribución, sin incrementar el volumen de extracción: 7.5 metros cúbicos por segundo, según la concesión de la Conagua. “No se sacará más agua al lago”, afirmaron, argumentando que el proyecto busca eficiencia y reducción de pérdidas.

Sin embargo, el Frente cuestionó este discurso, señalando que las mismas autoridades lanzaron en abril la licitación pública No. CEA-PRO-EST-LP-016-25, con un techo presupuestal de 6 mil 500 millones de pesos, sin haber consultado a las comunidades ribereñas ni presentado el anteproyecto correspondiente. “¿Cómo pueden avanzar con una obra de esta magnitud sin mostrar un solo estudio técnico ni diagnóstico ambiental?”.

A pesar de las solicitudes previas, el gobierno se escudó en que el proyecto aún está en una fase inicial y será hasta octubre cuando se entregue el proyecto ejecutivo por parte de las empresas Proyectos y Construcciones de Ingeniería Hidráulica y Civil S.A. de C.V. y Frais Proyectos y Edificaciones S.A. de C.V.

El Frente de Pueblos decidió cambiar la narrativa oficial centrada en el abastecimiento de agua a Guadalajara, y puso sobre la mesa el deterioro acelerado del ecosistema del Lago de Chapala. Recordaron que el lago está reconocido internacionalmente como Sitio Ramsar, pero hoy sufre un proceso agudo de contaminación, deforestación, pérdida de biodiversidad y devastación social.

“Nos han reducido a proveedores de agua para una metrópoli insaciable, pero aquí se están muriendo nuestras especies, nuestra salud, nuestras culturas originarias”.

Advirtieron sobre el envenenamiento del lago con agroquímicos y metales pesados provenientes de la agroindustria del agave y los monocultivos de berries, la pesca en crisis, el despojo de tierras por inmobiliarias turísticas y el abandono estatal frente a una crisis de salud pública reconocida por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en la Medida Cautelar 07/2020.

Con la exigencia, “no más megaproyectos sin consulta, sin estudios y sin respeto por los pueblos.” El Frente exigió el respeto al territorio de los pueblos originarios Coca y Wixarika, guardianes del lago, y demandaron que el lago de Chapala sea tratado como un ser vivo con derechos, no como una infraestructura hidráulica.

Pese a la falta de transparencia en torno al proyecto hidráulico, el Frente de Pueblos de la Ribera de Lago de Chapala reconoció como un avance la apertura del diálogo con autoridades estatales. Entre los acuerdos alcanzados destaca la instalación de una mesa de trabajo que abordará no solo los megaproyectos del acueducto Chapala-Guadalajara y Presa Solís, sino también las múltiples crisis que afectan al lago y a sus comunidades.

El Frente exigió además la entrega de estudios técnicos y minutas así como la realización de visitas comunitarias de inspección en zonas afectadas. “No se puede hablar de soluciones mientras se nos niega el derecho a la información y a participar en las decisiones sobre nuestro territorio”, reclamó una vocera del colectivo. También se exigió el compromiso de respetar los derechos humanos conforme al Acuerdo de Escazú y el Convenio 169 de la OIT.

El Frente exigió que el diálogo no sea un simulacro y advirtió que seguirán vigilantes y movilizados para defender el lago. “Este es solo el primer paso. No permitiremos que se construya nada sin transparencia, sin consentimiento y sin un compromiso real con la restauración del Lago de Chapala.”

Aunque la conformación de una mesa de diálogo fue reconocida como un avance, las comunidades ribereñas señalaron que aún hay temas urgentes pendientes por abordarse, especialmente los impactos del Acueducto Presa Solís y la falta de atención sostenida por parte de las instituciones ante la crisis ecológica y social que enfrenta el lago.

“El verdadero reto no es seguir construyendo infraestructura, sino restaurar un ecosistema herido por décadas de negligencia y saqueo”, advirtió un representante del Frente de Pueblos de la Ribera de Lago de Chapala durante la reunión.

Con el lema #EscuchemosAlLago y #EscuchemosALosPueblos, el Frente de Pueblos hizo un llamado a la ciudadanía, a los medios y a la comunidad científica a sumarse a la defensa de este cuerpo de agua vital para México.

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